jueves, 29 de mayo de 2014

Breve síntesis de los requisitos de la identificación de equinos en la UE

LEGISLACIÓN VIGENTE PARA IDENTIFICACIÓN OBLIGATORIA DE EQUINOS:

El Real Decreto 1515/2009 de 2 de octubre, por el que se establece un sistema de identificación y registro de los animales de las especies equinas, adopta las medidas necesarias para la aplicación efectiva del Reglamento (CE) Nº 504/2008, de 6 de junio de 2008 por el que se aplican las Directivas 90/426/CEE y 90/427/CEE en lo que se refiere a los métodos de identificación de los équidos. 

Esta normativa afecta a todos los équidos nacidos a partir del 1 de Julio de 2009, salvajes o domesticados, de cualquiera de las especies del género Equus, y sus cruces: caballos, asnos, mulas, burdéganos, cebras, tanto si son animales de razas puras, inscritos o registrados en libros genealógicos (équidos registrados), como si no lo son (équidos de crianza y renta)... 


A priori, todo animal equino está destinado y autorizado para consumo humano excepto:

- Equinos no identificados.

- Equinos nacidos antes del 1 de julio de 2009, identificados después del 31 de diciembre de 2009, y que por tanto, en la Sección IX de su pasaporte indica "animal no destinado a consumo humano" (pues la legislación mencionada lo exige así en este caso).

- Equinos de cualquier edad que en su pasaporte el veterinario haya suscrito "animal no destinado a consumo humano" por aplicación de productos medicamentosos.


Lo que está ocurriendo, es que existe aún una gran cantidad de equinos sin identificación alguna (Motivo: dejadez de sus dueños), lo cual, inmediatamente, al identificarlos a esta fecha, los hace no aptos para consumo humano. A partir de aquí, cada uno que opine como considere más apropiado, pero está claro que este problema irá desapareciendo en pocos años y los équidos terminarán estando, prácticamente todos, identificados, como lo están los perros, vacas, ovejas, cabras, etc.









La carne de caballo vuelve a las portadas y no por sus muchas propiedades

Cae una red dedicada al tráfico de carne de caballo para el consumo

Los detenidos están acusados de falsificar la documentación de los equinos

/ La Pobla de Vallbona / Barcelona 29 MAY 2014 - 09:06 CET29

 
Centenares de caballos —y, por tanto, toneladas de carne— han sido introducidos en el mercado de consumo español e incluso en el extranjero al margen de los controles sanitarios obligatorios. Es lo que se desprende de una investigación que durante meses ha llevado a cabo la Guardia Civil y que culminó este jueves por la mañana con la detención de cinco personas y con el registro de al menos ocho mataderos, además de explotaciones ganaderas y empresas en nueve provincias (Valencia, Asturias, A Coruña, Toledo, Ávila, Madrid, Valladolid, Zaragoza y Jaén).
El ministerio de Sanidad, que admitió desconocer el alcance de la investigación —la causa está declarada secreta—, llamó a la calma. No hay alerta sanitaria ni indicios de que la carne pueda ser perjudicial para la salud. Según una portavoz, el hecho de que la carne sea catalogada como “no apta” para el consumo humano no implica necesariamente que sea perjudicial para la salud.
El entramado desarticulado compraba caballos, presuntamente, fuera de los circuitos legales para dedicarlos al consumo humano. La procedencia de los animales es variopinta, según fuentes de la investigación: desde caballos de recreo que no han pasado los controles para el consumo hasta animales robados de los que se desconoce su historial sanitario. Los cinco detenidos se dedicaban a falsificar o modificar las cartillas sanitarias que el animal debe tener en regla y que se deben presentar en el matadero, según fuentes del caso. Los arrestados están acusados de un delito contra la salud pública, falsedad documental y organización criminal.
El tratante que ejercía presuntamente de cabecilla, Rafael H., lleva años trabajando en el mundo del caballo, donde es muy conocido. Según fuentes de su entorno, movía una cifra muy elevada de animales, tanto en el ámbito nacional como internacional, donde posee numerosos contactos. Junto a él ha sido detenido el propietario de la clínica equina Bonança, Vicente Javier O., en el municipio valenciano de Museros. Tanto el tratante como el veterinario están acusados de firmar de su puño y letra cartillas falsificadas, según fuentes de la investigación. El tratante dispone, además, de su propia cuadra con animales, justo al lado de la clínica veterinaria que fue registrada por la Guardia Civil.
Aunque la cifra varía en función del peso del equino, los investigadores calculan que la organización podía ganar unos 100 euros por animal. En una sola operación, el principal detenido podía llegar a mover un centenar de caballos, según fuentes judiciales, que apuntan a que también traficaba con otros animales, como burros.
En Valencia, fue registrado además un matadero y una empresa de distribución de carne de caballo. Los detenidos llevaban los equinos al matadero, donde eran despiezados. La empresa cárnica, dedicada a la distribución al por mayor, compraba después los animales y los introducía en la cadena de consumo.
La Guardia Civil registró ocho mataderos, además de explotaciones ganaderas y empresas (en total, 17 registros). El objetivo de los investigadores es aclarar el papel de los mataderos y las compañías en el entramado, y dilucidar si realmente eran conocedores del engaño o si, por el contrario, pensaban que los caballos cumplían con todos los requisitos.
La investigación lanzada este jueves es la continuación, en suelo español, de una red similar desarticulada el pasado diciembre en el sur de Francia. Los gendarmes detuvieron a 21 personas por falsificación de documentos. La trama compraba los animales a una empresa farmacéutica que los había utilizado para experimentación y que, al venderlos, ignoraba que iban a destinarse a consumo humano. La Fiscalía de Marsella descartó entonces el riesgo sanitario.
Aquella operación salpicó a un matadero de Girona, que entregó a la Guardia Civil diversa documentación. Y enlazó además con el tratante Rafael H., que ya aparecía en algunas conversaciones. Por ese motivo, se abrieron diligencias en el juzgado de instrucción 1 de Santa Coloma de Farners, que ordenó escuchas telefónicas.
Está previsto que los detenidos declaren este viernes ante la Guardia Civil. El operativo fue dirigido por la Policía Judicial de Cataluña, en colaboración con el Seprona y con miembros de la gendarmería francesa desplazados a Valencia, y contó además con la colaboración de instituciones europeas.

FUENTE:  www.elpais.com


lunes, 26 de mayo de 2014

Algunas imágenes del disfrute del ganado en los pastos de esta época







La agricultura ecológica florece















Nerea y Amaia Arzuaga recogen los últimos guisantes en la huerta de su caserío Intsusaran, con el municipio de Andoain al fondo. / UNANUE
  • En el último año la superficie destinada al cultivo ecológico en Euskadi ha crecido un 8%.

  • La cifra de productores alcanza los 389, y el objetivo del sector y el Gobierno Vasco es que se duplique en 2016



Estamos en primavera, la estación en la que posiblemente se puedan obtener menos verduras y frutas de temporada, cuando más flores hay y, a su vez, comienzan a plantarse las semillas para que broten en verano. Apenas un puñado de verduras aparecen en la lista de productos de temporada que Eneek, el Consejo de Agricultura y Alimentación Ecológica de Euskadi, muestra en su página web. Arrancan los guisantes, las habitas; finalizan la col y la lombarda y los ajetes frescos también comienzan a escasear. Las fresas, frambuesas, cerezas y grosellas marcan esta temporada de frutas. Pero la tierra ya está preparándose con vistas a finales del verano y comienzos de otoño, para que el periodo estival con su sol y sus lluvias ocasionales en nuestro territorio hagan su trabajo y las huertas y campos se vistan de verde. Y cada vez son más verdes, ya que la agricultura ecológica que hace unos años se catalogaba como fenómeno, ahora ya se ha convertido en incipiente cultura y saludable costumbre con un buen número de pequeños productores haciendo de la huerta su forma de vida.
«En Euskadi, la agricultura ecológica tiene posibilidades de crecimiento y el Gobierno Vasco busca incentivar este modelo de producción», admite el viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria del Gobierno Vasco, Bittor Oroz. Para conseguir ese objetivo, el departamento trabaja de la mano de Eneek en la elaboración del Plan de Fomento de la Agricultura Ecológica de Euskadi. El Ejecutivo Vasco pretende que para 2016 se duplique el número de productores ecológicos y el de hectáreas cultivadas. Una apuesta decidida, que junto a otras políticas de fomento del primer sector puestas también en marcha por Diputación y diversos ayuntamientos está ayudando a que el número de productores vaya en aumento en los últimos años.

Sin ir más lejos, la cifra de operadores y la superficie destinada al cultivo ecológico crecieron el pasado año un 8% en el País Vasco. Según los datos de Eneek, el número de productores inscritos se situaba a finales de 2013 en 389, una treintena más que a finales del curso anterior. Bizkaia experimentó un crecimiento del 10%, Gipuzkoa del 8% y Araba del 5%. De estos operadores, el 30% se ubican en Bizkaia, otro 30% en Araba y un 40%, aproximadamente 150 productores, lo hacen en Gipuzkoa.
Nerea y Amaia Arzuaga forman parte de este grupo de productores de agricultura ecológica. Llevan apenas tres años con el mono de productoras pero son firmes defensoras de la esta forma natural de alimentación. «No creemos que alimentarse con productos ecológicos o producirlos sea una moda, sino una necesidad de la sociedad», defienden. En sus huertas e invernaderos de los caseríos de Intsusaran y Azpillaga en Andoain siembran sin utilizar productos químicos y conservando el carácter natural de la tierra, sin agredirla ni presionarla en exceso. Muestra de ello es que en estos momentos sean escasas las verduras que están para ser puestas en las cestas de los consumidores. Apenas unos guisantes, unos ajetes, lechugas y alguna coliflor están listas para recoger. «Esta época es bonita para ver, por las flores que pueblan las plantas, pero a nosotras nos toca plantar ya las verduras para verano y otoño», apunta Nerea.
Ahora ya están sembrando calabaza, pimiento, tomate, zanahoria o patata para que la tierra comience a hacer su trabajo. Ellas han aprendido a hacerlo desde pequeñas aunque también han participado en cursillos de producción «en los que se enseñaba la producción convencional y no la ecológica que es lo que queríamos». De más jóvenes, ayudaban en casa a sus padres a cuidar la huerta, ya que siendo siete hermanos «todos teníamos que hacer algo si queríamos comer». Aun así, hasta hace poco no pensaban que se dedicarían ambas como oficio a ello. Amaia estudió magisterio y trabajó en una fábrica antes de decidirse por acompañar a su hermana gracias al programa Gaztenek del Gobierno Vasco y a las diputaciones territoriales.

El Ejecutivo vasco, a través del departamento de Desarrollo Económico y Competitividad, aportó una inversión de 7,5 millones para incentivar una agricultura más sostenible, ayudar a las explotaciones ganaderas menos intensivas y promover el desarrollo de la horticultura vinculada a la tierra. En ocho años han sido más de 450 los jóvenes que se han sumado al sector agrario, entre ellos Amaia y Nerea, de 30 y 40 años respectivamente, que vieron que era el momento adecuado para iniciar su aventura. «Lo que está claro es que el que se mete a hacer agricultura ecológica lo hace porque le gusta, ya que es un trabajo que exige un gran sacrificio», describe Nerea. «Aquí no hay días libres, trabajamos según el calendario biodinámico y cuando los días son más discontinuos tenemos algo de tiempo libre, pero lo aprovechamos para hacer papeleos o lo que nos toque», añade Amaia.
En sus tres años como productoras, Nerea y Amaia están comprobando que la cultura de la agricultura ecológica está calando tanto entre profesionales como consumidores, aunque desean «que los pequeños productores recibamos las mismas ayudas que las grandes instalaciones».
Los ciudadanos cada vez le dan más importancia al consumo de productos ecológicos. Según el último informe sobre consumo de la empresa Nielsen, un 10% de los españoles compra más productos ecológicos que hace un año, a pesar de que su precio sea más elevado. Nerea y Amaia, por ejemplo, surten a 30 familias con sus productos. Confeccionan cestas semanales a un precio no muy elevado para que las familias tengan hortalizas frescas y ecológicas para cubrir sus necesidades. «Hablamos con ellos, interactuamos mucho y confeccionamos al final nosotros su menú y ellos nuestra cesta, somos una familia completa», concluyen. Los propios compradores acuden a la explotación a retirar sus cestas y aprenden también de las técnicas y las costumbres del caserío. «La sonrisa de un niño que saca una zanahoria de la tierra es difícil de describir, igual que cuando ven las gallinas o juegan con los perros», confiesa Amaia.
Agricultura y ganadería
Las hermanas Arzuaga apenas disponen de media hectárea para la siembra de sus hortalizas ecológicas, aunque en el sector existen productores con más terreno. Eneek calcula que el número de hectáreas ecológicas alcanza las 2.627. En 2013, los tres territorios vascos incrementaron sus cifras de superficie del cultivo, siendo Gipuzkoa la que cosechó el mayor incremento con un 9%, frente a Araba (8%) y Bizkaia (6%). De estas superficies el 59% corresponde a pastos, praderas, forrajes y proteaginosas, el 20% a vid, el 6% a cereales y legumbres de grano, el 6% a frutales, el 5% a otros cultivos y el 4% a hortalizas. El cultivo de estas últimas ha crecido un 44% en el último año situándose en las 104,4 hectáreas dedicadas al cultivo de hortalizas.
Pero debajo de la denominación de agricultura ecológica, también se encuentra la ganadería. Menor en número, aunque de gran relevancia. El número de explotaciones ganaderas en Euskadi se sitúa en 77 y una de ellas, en este caso dos que se identifican bajo el mismo nombre, son las de Gregorio Zuaznabar y Fermín Murua. Estos dos ganaderos forman 'Behieko Sabekoetxea', una marca de productos lácteos ecológicos producidos con la leche de las vacas de los caseríos de ambos, situados en Anoeta y Altzo, respectivamente.
«Desde hace casi 20 años nos decidimos por la ganadería ecológica, aunque fue hace diez años cuando iniciamos esta aventura para hacer nuestros propios productos», recuerda Fermín Murua. En su caserío tiene 22 vacas, varios terneros y 22 hectáreas para pasto con las que alimentarlas. Ese es uno de los principios de la ganadería ecológica, el de alimentarlas con los pastos de la propia instalación. Además, existen otras normas implícitas, como el no poder tener más de dos vacas por hectárea de terreno, no utilizar ningún abono sintético para el pasto, la prohibición de usar herbicidas, que el ganado tenga la posibilidad de andar libremente por la cuadra y un uso muy limitado y concreto de medicamentos para el ganado. «En definitiva es una cultura que creemos que es la acertada y cada vez más consumidores se interesan por ella y por nuestros productos».
Los productores de Behieko hablan de la fidelización de la clientela, del impulso al sector que parece haber llegado definitivamente por parte de las instituciones y la conciencia que se va generando en torno a los productos ecológicos. «Nos damos cuenta de que la relación entre productores y consumidores está funcionando y las instituciones han mostrado su voluntad de seguir profundizando en esta línea. Ambas cosas nos dan mucha confianza a los productores ecológicos para seguir adelante», detalla Murua.
Esa evolución también tiene su reflejo en los resultados a final de año. El crecimiento de la facturación del conjunto de los operadores ecológicos de Euskadi durante 2013 creció un 30% respecto al año anterior, alcanzando los 13 millones de euros.

FUENTE: www.diariovasco.com

jueves, 15 de mayo de 2014

El principio del fin de los cultivos transgénicos

El informe "¿Quién se beneficia con los cultivos transgénicos?" revela que el 90% de los cultivos transgénicos se encuentran en solo seis países, Estados Unidos, Argentina, Brasil, India, Canadá y China, y son producidos solamente por el 1% de los agricultores del mundo.
Enviado por: ECOticias.com / Red / Agencias, 02/05/2014, 10:17 h | (1282) veces leída
Un nuevo informe publicado hoy por Amigos de la Tierra Internacional señala que el número de países que cultivan transgénicos se está reduciendo. Polonia y Egipto fueron los últimos países en suspender la producción de cultivos genéticamente modificados [1].

El informe "¿Quién se beneficia con los cultivos transgénicos?" revela que el 90% de los cultivos transgénicos se encuentran en solo seis países, Estados Unidos, Argentina, Brasil, India, Canadá y China, y son producidos solamente por el 1% de los agricultores del mundo. Un análisis de las cifras publicadas por la industria demuestra que el supuesto aumento de la producción de cultivos transgénicos que tuvo lugar en 2013 se limita a estos seis países [2]. 

Asimismo cada vez hay una evidencia mayor de que las variedades transgénicas no suponen una solución al problema del hambre o del cambio climático. Al contrario, los transgénicos cultivados actualmente en el mundo agravan ambos problemas. El 90% de los cultivos transgénicos disponibles en el mercado han sido modificados para ser tolerantes a herbicidas, lo que tiene como resultado un aumento desmedido del uso de estos agrotóxicos. Países como Estados Unidos, Argentina y Brasil, los mayores productores de transgénicos del mundo, son testigos de una tendencia del uso creciente de herbicidas sintéticos. En Estados Unidos, el 49% de los agricultores denuncian tener problemas con malezas resistentes a estos herbicidas [3].La Comisión Europea podría autorizar próximamente una nueva variedad de maíz transgénico. Se trata del maíz 1507 propiedad de Pioneer Hi-Bred, y sería el primer cultivo tolerante a herbicida autorizado en la Unión Europea [4]. “Hay una amplia y negativa experiencia en torno a estos cultivos; la aplicación desmedida de herbicidas tóxicos está causando problemas graves a la salud de las personas y el medio ambiente. La UE tiene que apostar por una agricultura que fomente la biodiversidad y proporcione alimentos sanos”, ha afirmado Blanca Ruibal, responsable de Agricultura y Alimentación de Amigos de la Tierra.

En la Unión Europea, la producción de maíz MON 810, propiedad de Monsanto, única variedad transgénica autorizada, disminuyó en Portugal, Eslovaquia y República Checa. Solo en España se produce una cantidad significativa de transgénicos, pero el baile de cifras en torno a la superficie indica que el área cultivada con maíz transgénico podría ser en realidad de unas 70.000 hectáreas, la mitad de lo que publicitan el gobierno y la industria [5].

En todo el mundo, los expertos reclaman un cambio hacia métodos de producción agroecológicos para hacer frente al hambre y producir alimentos sin poner en jaque los recursos naturales escasos. Se ha demostrado que estos métodos duplican el rendimiento de la producción en África y combaten las plagas con eficacia [6].


Notas:

[1] El informe de Amigos de la Tierra Internacional "¿Quién se beneficia con los cultivos transgénicos? Una industria fundada en mitos" se encuentra disponible en Internet.
Resumen del informe en castellano: http://www.tierra.org/spip/IMG/pdf/quien_se_beneficia_de_los_trangenicos.pdf