Este año, de forma excepcional, todo el ganado permanecerá expuesto bajo las tres carpas que se volverán a habilitar el el recinto ferial. Su concentración pretende «controlar el número de cabezas para evitar problemas, sobre todo cuando está en juego la seguridad de la gente», insistió el alcalde. Bajo esta premisa, según admitían desde Lorra, el Ayuntamiento se decantó en un principio por limitar la feria al ganado de exposición. «La idea que tenían era la de quitar la compra-venta para evitar problemas a los visitantes, pero nos pareció algo radical hacerlo de la noche a la mañana. Por eso propusimos ordenarlo y adecuar el número de participantes al espacio del que disponemos», detallaron desde Lorra.
El Ayuntamiento aceptó y se planteó un plazo de inscripción, que se cerró el jueves, a pesar de que desde ENBA propusieron el lunes que se ampliara hasta el domingo. Si llegado el día 3 se presenta algún ganadero sin inscribir, porque no se ha enterado, «será el Consistorio el que tome medidas», precisó Koldo Bilbao, coordinador de Lorra
Muestra de aves
A estas 70 cabezas se sumarán otras 156 en el apartado de exhibición. Así, en una de las carpas se expondrán 44 cabezas de ganado vacuno de primera calidad, 9 de raza pirenaica, 17 charolesa y 18 limousina procedentes de explotaciones de la zona. El mejor lote de animales recibirá un premio, al igual que el mejor ganadero local, el mejor toro, la mejor vaca y la mejor novilla.
Una segunda carpa acogerá otros 64 animales de las razas pirenaica, blonda de Aquitania, limusin, charolesa, frisona, terreña, betizu y monchin. Todas ellas se presentarán identificadas con su genealogía, sexo y fecha de nacimiento. La tercera carpa estará destinada a la compra y venta de animales, así como a la exhibición de 36 ovejas y cabras de las razas latxa, sasi-ardi y azpigorri. También habrá 4 caballos de monte, 4 potxokas y 4 burros, así como un espacio dedicado a la muestra de aves de distintas especies.
La muestra ganadera se completará con el mercado agrícola, en el que 72 baserritarras mostrarán sus mejores productos. Lo más selecto será recompensado, además, con distintos premios. El recinto acogerá diez de viveristas con distintas plantas y árboles frutales, 19 de maquinaria agrícola, 20 dedicados a rosquillas, dulces y cordones, así como otros 26 de artesanos de todo el País Vasco
Gracias a la colaboración de la agrupación Arbaso, el mercado de artesanía contará con demostraciones de vidrio a cargo del guipuzcoano Igor Obeso, y otra de realización de vidrieras, de la mano del vizcaíno Juan Carlos de Diego. La navarra Aziza Punch dirigirá un taller de pañuelos de seda.
